La Luna, con su movimiento constante, influye en nuestras emociones, nuestro cuerpo y nuestra energía. Así como afecta las mareas, también modula nuestro campo energético, y al combinarla con la práctica de Reiki, se abre una puerta poderosa de sanación, liberación y manifestación.
¿Por qué trabajar con la energía lunar en Reiki?
Cada fase lunar representa una frecuencia distinta. Cuando alineamos nuestras sesiones de Reiki con el ritmo de la Luna, potenciamos su efecto, armonizando nuestro cuerpo y espíritu con los ciclos naturales de la vida.
La Luna nos enseña a confiar en los procesos, a dejar ir lo que ya no sirve y a abrirnos a lo nuevo con intención y claridad.
Fase Nueva: Introspección y siembra
La Luna Nueva es el momento de la oscuridad fértil. Aquí el Reiki trabaja como una semilla energética: es ideal para intenciones nuevas, comenzar procesos de sanación profunda o trabajar la energía del útero en mujeres.
Ritual con Reiki:
Haz una auto-sesión breve poniendo las manos en tu corazón.
Visualiza una luz suave que nace en ti.
Formula una intención clara y colócala energéticamente en tus manos.
Siente cómo esa semilla se arraiga con amor y paciencia.
Cuarto Creciente: Movimiento y acción
Es el tiempo de la expansión. La energía empieza a subir, como una planta que brota del suelo. Aquí puedes aplicar Reiki para reforzar decisiones, obtener claridad y avanzar sin miedo.
Ritual con Reiki:
Trabaja los chakras inferiores para activar el cuerpo.
Aplica Reiki en piernas y pies para tomar impulso y dirección.
Visualiza caminos que se abren con facilidad.
Luna Llena: Culminación y liberación
La Luna está en su máxima expresión. Es tiempo de soltar bloqueos, emociones estancadas y viejos patrones. Reiki en esta fase ayuda a limpiar el aura, cortar lazos energéticos y liberar cargas.
Ritual con Reiki:
Haz una limpieza energética con Reiki en cada chakra, de raíz a corona.
Puedes usar cristales o sahúmo para apoyar el proceso.
Visualiza cómo una luz blanca te rodea y se lleva todo lo que ya no vibra contigo.
Cuarto Menguante: Integración y descanso
Aquí el cuerpo y el alma piden recogimiento. Es ideal para practicar Reiki en modo suave, reconectar con el cuerpo, aceptar lo aprendido y dejar que el proceso madure en calma.
Ritual con Reiki:
Trabaja con respiración y Reiki en el plexo solar y el corazón.
Agradece el camino recorrido.
Permítete descansar sin culpa.
Conclusión: Reiki como brújula energética lunar
El Reiki y los ciclos lunares se complementan como una danza suave y poderosa. Cuando te alineas con la Luna, tu práctica se vuelve más intuitiva, más profunda, más natural.
Empieza a observar cómo te sientes en cada fase y adapta tu práctica a lo que tu cuerpo y tu alma realmente necesitan.
Recuerda: la energía no es lineal, es cíclica. Y en esa ciclicidad está la medicina.
¿Te gustaría que te acompañe en tu proceso de reconexión lunar?
En La Chamanería, puedes encontrar meditaciones, rituales guiados y sesiones personalizadas para acompañarte fase a fase.
La Luna cambia… y tú también puedes hacerlo con consciencia y amor.